viernes, 6 de marzo de 2009

The trip

Siempre he creído que la inocencia a través de la cual mira un niño, sus ansias por descrubrir, su sorpresa ante lo inesperado, su actitud y predisposición ante la aventura, muestran las señas de identidad de la esencia del viajero. Todos en el fondo somos niños cuando empredemos un viaje, cuando recorremos lugares que habíamos soñado, que habíamos conocido por libros y documentales. En verdad casi todas las personas tenemos dentro el ansia viajera, siempre emerge el niño que llevamos dentro.

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